jueves, 25 de agosto de 2011

Para empezar.

Normalmente escribo en este espacio que casi nadie lee cuando no puedo dormir, no es la ocasión. La verdad es que me muero de sueño, a pesar de que no es tan tarde.

Mi tarea, grita, para que la haga, pero no puedo, mi mente viaja lejos...

Escucho una canción que alguien me recomendó y me hace pensar en ese "alguien". Pero no el que me recomendó la canción, porque "alguien" son muchas personas, en algún momento de nuestras vidas, la gente se han referido a nosotros como "alguien".

El problema viene cuando te sientes "nadie", cuando no sabes que hacer, ni que decir. Cuando ni siquiera sabes que sentir, o si lo que sientes es real, o si está bien, o qué serías capaz de hacer por lo que quieres...

O qué quieres...

Culpar a la canción que escuchas es muy fácil, siempre es muy fácil delegar responsabilidades. Y probablemente eso haga, porque me asusta pensar que no sé de dónde viene esa incertidumbre. O peor aún, si se irá.

Desde muy pequeña, los comentarios de la gente hacia mí al responder "No sé" a una pregunta han sido: "Tú nunca sabes nada".

Y tienen razón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario